Nuevo Imparcial.– Alcobendas continúa celebrando la XVI Semana del Mayor. Ayer tuvo lugar uno de los actos más importantes y emotivos de esta Semana con el tradicional homenaje a los mayores durante el cual, además, se hizo un reconocimiento a los tres vecinos ‘menos jóvenes’ de la ciudad. Fue una jornada muy especial en la que estuvieron presentes familiares y amigos de los homenajeados. Los tres homenajeados de este año tienen todos un siglo de vida y nacieron con sólo un mes de diferencia entre cada uno de ellos, en el año 1913. Nemesio España, el ‘mayor’ de los tres, nació en febrero en la provincia de Segovia. En tierras serranas se crió y pasó parte de su juventud como pastor hasta que llegó la guerra. Pasada la contienda conoció a Mártires la jovencita que sería su esposa y que aún le acompaña a día de hoy. Llegó a Alcobendas cuando solo era un pueblo que empezaba a crecer. Compraron entonces un pedazo de tierra cerca de los lavaderos de Plaza de Castilla y allí, con sus propias manos, levantaron su casa. Trabajó en la construcción hasta que se jubiló y desde entonces dedica su tiempo a lo que siempre le ha gustado “leer y tapizar”. Aún hoy lo hace “un poquito” y sobre todo dedica su tiempo y su energía a su mujer y a su familia.
Un mes después, en marzo, nacía Josefa Cruceyes, en Sevilla. Desde muy jovencita el trabajo de sus padres la obligó a cuidar de sus cuatro hermanos como una pequeña madre. Apenas siendo adolescente conoció “a un guapo chico del barrio, Rafael” que sería su compañero en la vida durante más de setenta años. Con él tuvo dos hijos y desde el primer momento se puso a trabajar en una fábrica compaginando el trabajo con el cuidado de la familia. Rafael, su marido, hizo carrera musical y se convirtió en profesor del Conservatorio de Música de Sevilla y Subdirector de la Orquesta Municipal de la capital hispalense. Con 80 años se vino a vivir a Madrid con su hija Clara. Hace unos años perdió a su compañero y hoy, con las limitaciones lógicas de su edad, vive alegre en compañía de los suyos.
La más ‘joven’ de los tres, Marcela Rincón, nació en abril en Arenas de San Juan (Ciudad Real). Allí pasó su infancia y juventud y allí conoció al que sería su marido, Alfonso Gómez Heredero. A los60 años se vinieron a vivir a Alcobendas buscando lo mejor para sus tres hijas y su hijo. Además de sacar adelante a la familia en casa también tuvo que trabajar fuera, fundamentalmente lavando ropa en los lavadores, por aquel entonces el de las Charcas, en el Paseo de la Chopera y en los de Plaza Castilla, al final de la calle Segovia. Ha conseguido formar una numerosa familia con 16 nietos y 34 bisnietos. Vive con su hija, Demetrio y aún hoy conserva su afición a cantar y a recitar como lo ha “hecho toda la vida”.